Acogida
Relatos
Principio
Anterior: Zambia
|
Capital: Windhoek
Idiomas: Inglés, Afrikaans (oficial), Alemán, Portugués, Bantu (Ovambo, Herero), Khoisan (Nama, Khoikhoi, San), |
Los primeros habitantes de los desiertos de Namibia y Botswana, fueron los fuertes San, cuya presencia aquí data desde el año 100 d.C. Su lenguaje único con chasquidos, fue compartido por los Khoikhoi, quienes vinieron del sur por el año 500 d.C Posteriormente, las tribus Bantú empezaron a trasladarse desde el noreste, primero los Ovambo, quienes se establecieron en el norte alrededor de 1300 d.C. y luego los Herero, quienes empujaron a los Hkoikhoi al desierto o los pantanos de Botswana alrededor del año 1600 d.C. La gente que resistió y hablaba Khoisan, dio origen al pueblo moderno de Nana. ESta parte desolada de África se convirtió en África Alemana del Oeste en 1884. En 1904, la rebelión de las tribus Herero y Nama contra el duro régimen alemán fue reprimida en una matanza, en la cual el 60% de la población nativa fue asesinada. Durante la Primera Guerra Mundial, la colonia alemana fue invadida por Sudáfrica a quien la Liga de las Naciones le dio el mandato de gobernar "Africa del Suroeste". En 1966, las Naciones Unidas terminaron este mandato, pero Sudáfrica introdujo sus leyes de segregación racial y seguridad, y continuó ocupando el país ilegalmente hasta que la guerrilla dirigida por la South West Africa People´s Organization (SWAPO) y la intensa presión internacional le hicieron otorgar independencia a Namibia en 1990. Las cosas se han mantenido estables entre el gobierno negro pragmático bajo la presidencia de Sam Nujoma y la minoría blanca de negociantes, en vista del siglo de opresión violenta de los blancos antes de la independencia. |
|
| CIA | ||
No había servicio de bus a Botswana, así que no tuve otra opción que pedir aventón desde las Cataratas Victoria hasta la frontera con Botswana en Kasane. Había poco tráfico y nadie paró hasta que este gran camión me recogió. Viajar de aventón no es gratis en esta parte del mundo, uno negocia la tarifa con el conductor. Es una forma normal de viajar donde no existen buses.
Había planeado bajarme en la frontera con Botswana en Kasane para visitar el Parque Chobe y su vida salvaje, pero me llevé tan bien con el conductor Fritz Tsuseb y su ayudante Mathias, que decidí ir con ellos hasta Grootfontein en Namibia. Ese es Fritz mientras camina desde el puesto fronterizo de Botswana-Namibia en Ngoma.
Los pueblos como éste son cada vez mas escasos al ir hacia el oeste donde hay menos lluvias. Me perdí el Parque Chobe en Botswana, pero ví algo de vida salvaje en el seco Parque Caprivi Oeste. El camino fue largo y polvoriento. Paramos de vez en cuando y pude conocer a Hans, el conductor del otro camión y su ayudante Nicholas.
Llegamos a Grootfontein al amanecer. Las dos tripulaciones necesitaron un descanso después de manejar 20 horas. Dormimos un par de horas, yo me fui hacia el norte al Parque Atosha y ellos continuaron al sur hacia Windhoek con su carga de azúcar.
De Grootfontein, tomé un taxi colectivo hacia Tsumeb, un segundo taxi me llevó hasta el cruce hacia el parque y finalmente dos trabajadores de un camión me llevaron gratis hasta la entrada este del parque en Namutoni.
Aquí aprendí que no había transporte público en el parque durante esta época del año porque hay muy pocos turistas en la temporada lluviosa. Los turistas se agrupan aquí en la temporada seca cuando es fácil encontrar animales, ya que éstos deben llegar a los bebederos conocidos cada día.
Después de andar por allí un rato, tuve suerte y me encontré con Gerhard Geldenhuis, un contratista que construye bases de concreto para torres de microondas en todo el parque. Me ofreció llevarme, pues el iba a la entrada oeste del parque en Okaukuep, haciendo algunas paradas en sitios de trabajo que le quedaban en el camino. Era un tipo interesante con mucha experiencia, que creció en tiempos de la supremacía blanca, pero que ahora se había adaptado a la toma del gobierno por parte de la comunidad negra.
Esta era la temporada lluviosa pero el Parque Etosha me pareció bastante seco. Gerhard me explicó que en la temporada seca la mayoría del parque se convierte en un desierto parecido al área estéril al fondo que se llama la Cuenca Etosha.
Cuando viene la lluvia, la vegetación crece rápidamente y los animales se esparcen por todo el parque, pues se encuentra agua en todas partes. En la temporada seca, estas gacelas del Cabo se amontonan alrededor de un bebedero, donde son más vulnerables para los depredadores.
La delicada gacela es un hermoso animal con una franja oscura al lado que hace contraste con su espalda café claro y su barriga blanca.
Tuve la buena suerte de ver muchos animales, aunque era temporada lluviosa.
Vi muchas gacelas, dos docenas de avestruces, una docena de gnús, igual cantidad de elefantes y jirafas, unas cuantas zebras y un rinoceronte. No vi ningún león, leopardo, hiena u otros predadores, pero debieron estar allí con toda esa carne alrededor.
Yo era el único turista en Okaukuep, así que obtuve un precio especial (US$ 30) por una cabaña lujosa de tres camas con sala, baño y cocina, lo cual era el único alojamiento disponible allí.
A la mañana siguiente, me dio un aventón hacia Outjo uno de los guardianes, y allí pude tomar un taxi hacia Windhoek. El conductor negro no era hostil, pero no era muy comunicativo. Dos pasajeros negros se subieron en Otjiwarongo y viajamos el resto del camino en silencio, a pesar de mis esfuerzos para romper el hielo.
Estaba lloviendo a cántaros cuando llegamos a Windhoek. Hice unas llamadas y encontré un cuarto en la posada para mochileros "Cardboard Box" por US$ 7, y la lluvia paró lo suficiente para que llegara allí caminando. Me familiaricé con los otros viajeros, llamé a un amigo en la ciudad, lavé mi ropa y descansé.
Pasé tres días en Windhoek no sólo de visita, sino haciendo mis tareas de viajero, lavando, revelando fotos y escribiéndoles notas atrás, enviando postales, comprando recuerdos y enviándolos a casa, etc. Desde aquí, envié un cascarón de huevo de avestruz, el cual valoro grandemente.
En mi última noche aquí, me invitaron a cenar Richard y Charlotte Laaser. Charlotte es hermana de una amiga mía de Montreal. Richard administra su propio negocio instalando sistemas de seguridad para hogares y oficinas. ¡Es un buen negocio en África en estos días!
Al siguiente día, continué mi viaje, esta vez por medio de bus nocturno hasta Capetown, un viaje de 18 horas. Este es el borde al oeste del desierto de Kalahari, al sur de Windhoek.
